Asegurar la sostenibilidad en la producción de alimentos es el propósito del Decreto Ley 300 que otorga tieras ociosas en usufructo y que entró en vigor en diciembre de 2011.
Esta legislación y sus resoluciones complementarias derogan el Decreto-Ley 259, vigente desde el 2008 y abre nuevas posibilidades para elevar la producción de alimentos en Manatí.
José Luis García Alemán Delegado de la Agricultura en el terrirtorio destacó que desde el 2008 hasta la fecha se fomentaron más de mil 700 fincas dedicadas en lo fundamental a la ganadería, cultivos varios y ganado menor.
Las nuevas modificaciones posibilitan ampliar la cantidad de áreas en
usufructo hasta 67,10 hectáreas (antes solo podía llegarse a 40,26) y
su vinculación puede ser con cualquiera de las formas productivas
agropecuarias, a diferencia del cuerpo legislativo anterior que fijaba
esta relación solo con las cooperativas de crédito y servicios.
También se favorecerá la construcción, modificación o ampliación de
viviendas dentro del área productiva, un reclamo de muchos campesinos
para garantizar la vigilancia y atención de los cultivos. Para esto se
requiere permiso del Instituto de Planificación Física.
El Decreto Ley 300 se instauró con una cifra municipal de 16 mil
hectáreas declaradas ociosas, cifra abundante en extensión y para la cual se han aprobado 32 solicitudes de usufructo.
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